México D.F., 25 marzo 2016.– Las personas defensoras de derechos humanos son actores clave en el ámbito de las empresas y los derechos humanos. Tienen una perspectiva única a la hora de hacer valer la protección y el respeto de los derechos humanos en el contexto de proyectos económicos de gran escala. A menudo, tienen un profundo conocimiento de la situación y del contexto local, y una sólida comprensión de las necesidades de las comunidades. Las personas defensoras desempeñan un papel fundamental a la hora de defender los derechos de la población local y advertir de determinados riesgos. También son fundamentales para sensibilizar en los planos nacional e internacional, para advertir de un conflicto violento inminente y para documentar, denunciar y divulgar información cuando ya se han producido violaciones a los derechos humanos.

Sin embargo, los proyectos en terreno de Brigadas Internacionales de Paz (PBI)
reciben cada vez más peticiones de acompañamiento y protección por parte de
personas, organizaciones y comunidades que defienden o promueven derechos
ante inversiones a gran escala. Con demasiada frecuencia estas personas
defensoras carecen de garantías básicas para su seguridad y están expuestas a
campañas de difamación y persecución legal diseñadas para obstaculizar su trabajo
junto a los titulares de derechos y las víctimas. El Relator Especial de Naciones
Unidas sobre la situación de los Defensores de Derechos Humanos ha alertado
en distintas ocasiones de que este grupo de personas se encuentra entre los
más vulnerables. Según Global Witness, al menos 908 personas defensoras han
sido asesinadas desde 2002 en el contexto de una mayor competencia por el
uso de la tierra y los recursos naturales. El informe anual de Frontline Defenders
2016 identifica al grupo de personas defensoras con mayor riesgo: aquellas
que se dedican a defender la tierra, proteger al medio ambiente y a los pueblos
indígenas. Asimismo expresa preocupación por las mujeres defensoras quienes
están expuestas, no solamente a los riesgos que implica su tarea, sino también a
la violencia de género, el hostigamiento y la estigmatización.

Por todo ello, PBI decidió recopilar experiencias de protección y promoción de derechos construidas desde la base en contextos de grandes inversiones en la publicación "Pienso, luego resisto".

La puede descargar en: bit.ly/PiensoResisto